Los 12 funcionarios fueron dados de baja por cometer delitos de cohecho, hurto y apremios ilegítimos, y no se descarta vínculos al narcotráfico.
Algunos carabineros de la Segunda Comisaría de Santiago cobraban hasta 600 mil pesos diarios a comerciantes, principalmente de nacionalidad china, a cambio de protección en el Barrio Meiggs.
Concretamente, 12 funcionarios fueron detenidos y posteriormente dados de baja por cometer delitos de cohecho, apremios ilegítimos, hurto, tráfico y detención ilegal. La investigación, realizada por la Fiscalía Centro Norte y la unidad de Asuntos Internos de Carabineros, reveló que los ahora exuniformados cobraban grandes sumas de dinero a los comerciantes, a veces varias veces al día, logrando reunir hasta 5 millones de pesos mensuales, los cuales eran repartidos entre los involucrados.
“El cohecho tiene que ver con recibir aportes económicos a cambio de efectuar algunas diligencias propias de su cargo o omitir diligencias a las cuales estaban obligados”, explicó la fiscal Marcela Adasme.
Alfonso Numi, presidente para la Asociación para el Desarrollo del Barrio Meiggs, aseguró a 24 Horas que los carabineros cobraban “en los turnos de mañana y tarde. 300 mil pesos en la mañana y 300 mil en la tarde por una vereda, por una calle. También entendemos que han habido cobros que le hacían a algunos locales en particular en la mañana y en la tarde”.
“También realizaban otras actividades ilícitas. Se vinculaban a las actividades de crimen organizado, ya que permitían que en algunos horarios en el barrio se pudiera vender cigarros de contrabando, que se hiciera la carga y descarga de estos productos”, mencionó.
Asimismo, uno de los imputados será formalizado por el delito de apremios ilegítimos, ya que fue acusado de golpear a una persona de forma injustificada.
“En vista de un procedimiento irregular, esta persona pone resistencia y es golpeada”, complementó la fiscal Adamas.
Tras la detención, el general director de Carabineros, Ricardo Yáñez, afirmó que desde la institución “no dejaremos espacio a que delincuentes se infiltren haciendo uso de nuestro uniforme para cometer y dañar el incansable y abnegado trabajo de quienes fomamos parte de Carabineros de Chile”.